Hoy hace un mes que Mireia Belmonte ganó la primera.
Un día antes de iniciarse los Juegos hice una previsión,
como tanta gente que nos las damos de pintiparados.
Y resulta que he estado cerca, muy cerca.
ACERTAR es cuestión de observar, pisar suelo, y no dar nada por sentado. Celia Castaños entrenando en CAR de Madrid By: Carlos Beltrán |
Me preguntan que cómo estaba tan seguro de algunas cosas por las que nadie apostaba, y casi mejor lo dejo aquí explicado, junto con alguna idea más.
¿Por qué razones
unas previsiones se acercan a la realidad y otras no?
Mis razones:
Mis razones:
Por un lado, no
tengo medallitis: No relaciono el número de medallas con la salud del deporte.
Porque desgraciadamente, en España, pocas veces guarda relación una cosa con
otra. Tengo claro clarinete que cuando hablamos de Juegos Olimpicos hablamos única y exclusivamente de deporte de élite.
Si estás en lo
que se celebra, es decir, si conoces el nivel de los deportistas de aquí y de
allí. Si te fijas en sus marcas, sus progresiones, sus actuaciones en mundiales
y europeos. Si conoces a rivales del mismo nivel y sabes si están bien,
arrastran lesiones, resultan flojos en alta competición… entonces es más
sencillo hacer previsiones que se acerquen a la realidad,
En cualquier
caso, no deja de ser un juego, al que jugamos cómodamente en el sillón de casa.
Y un juego ventajista, porque si aciertas es la pera y si no, simplemente te
has equivocado.
Antes de los
juegos alguien dijo que los deportistas españoles tenían ¡46 opciones de
medalla! Eso sí que fue una pasada de frenada, o un intento de echar las campanas al vuelo. No me
preocuparía si ese alguien no fuese el presidente del CSD.
También es
verdad que con esas 46 opciones veía posible conseguir “alguna más que en
Londres 2012”. Lo que ha estado cerca de cumplirse. Con la nueva y retroactiva de
Lidia Valentín de Londres 2012, en Río 2016, de momento, ha sido una menos.
Teniendo en
cuenta que el número de finalistas y medallistas NO da una idea clara del nivel
de otro deporte que no sea el de élite y/o de alta competición, cuento
rápidamente por qué dije lo que dije, y lo que ha pasado.
En
lo global:
La previsión fue
de 15-20 medallas, han sido 17.
Y 36-40 diplomas, han sido 38.
Cierto que una
horquilla de cinco en un total de 20 es grande, pero había quien hablaba de 26
y quien decía 13-14.
En cuanto a
diplomas, lo he clavado ¿No?
En
lo particular.
1.- Taekwondo. Previsión 2-3
Resultado 2 (1
plata, 1 bronce) y 1 cuarto puesto.
Sí. Ese cuarto puesto de Jesús Tortosa pudo ser más. Mi sensación, aún no contrastada, es que en el primer combate Jesús salió algo más conservador de lo habitual y ahí se le torció el camino al oro. Pero Jesús está ahí, en la máxima dimensión de su deporte, claramente pudo ser medalla.
Conocer a Joel, Eva y Jesús y conocer a sus rivales, en este momento, es relativamente sencillo pues se enfrentan habitualmente en competiciones por el ranking internacional. (No, no sale en televisión)
2.- Piragüismo. Previsión 1-2
Resultado 4 (3
oros, un bronce) y 1 cuarto y 3 diplomas más.
Un ejemplo de que el deporte de alta competición en un territorio no es reflejo del nivel general de ese deporte es el Piragüismo. Contaba con Craviotto desde hace meses como medallista, y con Maialen Chourraut. Tanto a Benavides como a Cooper como a Portela les veía en finales, y la verdad es que en una final puede pasar casi cualquier cosa.
Lo que han hecho Marcus Cooper y Sete Benavides es realmente prodigioso.
Lo de Teresa Portela es para erigir una estatua en su honor, no solo en Cangas de Morrazo, no sólo en Pontevedra, sino en cada centro de piragüismo del país. Pero no se va a hacer, porque Teresa se retirará y de ella no volveremos a hablar. Somos así, qué le vamos a hacer.
Que el piragüismo español haya metido el K4 masculino en una final olímpica es de asombro, y seguramente por esas embarcaciones grandes podrá llegar algún día la definitiva popularización de este deporte. ¿Habrá quien apueste por ellas?
3.- Natación. Previsión 2- 3
Resultado: 1 oro
y 1 bronce. 1 cuarto puesto y 1 diploma más.
Contaba con unos resultados globales algo mejores, pues esta vez la selección para los Juegos era algo más sólida que en otras ocasiones
Las medallas se
las dejaba a Mireia, incorporando la de 800, algo difícil pero no imposible,
como ella misma se ha ocupado de demostrar. Creo que el orden de pruebas y el calendario en general no han
favorecido a Belmonte.
También contaba con la que todo el mundo llamaría sorpresa de María Vilas, pero pienso que más bien es una cuestión de favoritismos personales porque me encanta la natación de esta deportista.
También contaba con la que todo el mundo llamaría sorpresa de María Vilas, pero pienso que más bien es una cuestión de favoritismos personales porque me encanta la natación de esta deportista.
Lo que sucede ahora es que la natación española está en la opción de pegar un salto grande en
niveles de base, sobre todo en categoría femenina, pues las niñas han visto que
se puede. Y lo que puede pasar es que viendo lo que interesa en el gobierno de España que la natación sea un deporte capital, que es entre
nada y casi nada, es muy posible que Mireia y sus cuatro medallas sean un tren
que vimos pasar, aplaudimos, hicimos fotos, y dejamos marchar (como hicimos después
de Londres 2012)
Resultado 2 (1
oro 1 plata) y 2 diplomas
Todo el mundo
del atletismo daba esta cifra, algunos optimistas pasaban a 4, dando a la
marcha española mayor responsabilidad.
Los rivales de
Orlando estaban como estaban, y Orlando estaba como estaba, así que contábamos
con su medalla.
Ruth Beitia
merecía medalla, y a veces el deporte tiene mucho de romántico y épico. Ahora.
Una final emocionantísima basada en alturas no demasiado interesantes desde el
punto de vista del logro de máximos. Pero se rescató en esa final la esencia
original de los juegos de la antigua Grecia, gana quien gana, sin importar la
marca. Y con la misma marca de Sara Simeone en Moscú 80, lejos de los 2,06 de
Slesarenko en Atenas 2004 o los 2,05 de Kostadinova en Atlanta 96, Hellebaut en
Pekín 2008 o Chicherova en Londres 2012 (cuánta rusa en esas alturas, uy uy uy),
Ruth pintó de color dorado la noche de Río y la madrugada de España. Nos dejó
sin dormir para poder soñar con ella.
Y ahora… la altura femenina en España, desde que se llamaba Marta Mendía, se llama Ruth Beitia. Y nada, nos tendremos que centrar en otras pruebas atléticas, porque de altura femenina no vamos a volver a hablar hasta que pasen los años suficientes para que una de las muchas niñas que ha visto que Ruth puede, se ponga a pensar en subir más alto de los 2 metros. Pasarán años, muchos años. ¿A que si?
Y ahora… la altura femenina en España, desde que se llamaba Marta Mendía, se llama Ruth Beitia. Y nada, nos tendremos que centrar en otras pruebas atléticas, porque de altura femenina no vamos a volver a hablar hasta que pasen los años suficientes para que una de las muchas niñas que ha visto que Ruth puede, se ponga a pensar en subir más alto de los 2 metros. Pasarán años, muchos años. ¿A que si?
Los diplomas llegaron, con todo el mérito. Aunque desde el campeonato de Europa hasta los juegos el paso adelante esperado se dio hacia atrás. Muchas veces cuestión de adaptación. Creo, y me perdonarán los expertos si estoy equivocado, creo que la adaptación a Río no se ha llevado a cabo suficientemente bien. Aunque por otro lado, creo que en este momento tenemos un atletismo mejor que hace pocos años, y la sensación que da es que es un atletismo más limpio, lo que sin duda dará sus frutos, tal y como están las cosas.
5.- Triatlón. Previsión: 1
Resultado; 1
diploma
La carrera
masculina resultó incomodísima para los que contaba como posibles medallistas.
Mola y Alarza. Mario Mola demostró que si se hubiese encajado en el grupo bueno
en el sector de la bici habría estado ahí.
En la carrera
femenina un pinchazo dejó a Carolina Routier sin opciones de demostrar que lo
que hizo nadando lo podía repetir en los dos sectores siguientes. Y por ahí
estaba, porque la natación fue un verdadero espectáculo de fuerza y decisión.
Ahora, el
triatlón masculino seguirá en la élite mundial, con Moya a la cabeza cuando se
recupere y con el resto en lo más alto. El femenino seguirá necesitando sponsors
que no llegarán fácilmente y el popular seguirá creciendo porque es un deporte
completísimo y apasionante.
6.- Vela. Previsión 1-2
Resultado 1
cuarto, y 1 diploma más.
La Vela es ese deporte que va en paralelo y de pronto hace un extraño y encuentra una bisectríz durante los Juegos. Durante el ciclo olímpico se mantiene como gato panza arriba a un nivel extraordinario. Y cuando encaja perfecto el calendario olímpico, aparece el trabajo continuado y persistente de muchos meses. Sin duda había opciones de podio, y ahí han quedado clarísimamente esbozadas. La gesta de Echegoyen y Betanzos pasa desapercibida, pero han estado ahí hasta el sprint final de la medal race. Y eso es algo muy grande.
Y Marina Alabau
ha demostrado, una vez más, que estaba, como desde hace años, aferrada a la cumbre de la vela mundial. No era de locos pensar en dos medallas, ni
resulta un desastre no haber conseguido ninguna.
Sería
interesante que en los próximos meses hubiese algún medio que diese alguna
noticia sobre vela en categorías olímpicas. Igual así pasamos de la ignorancia
al interés y del interés al conocimiento.
7.- DEPORTES DE EQUIPO
Rugby. Previsión 1
Resultado
diploma
Sobre esto, me
lancé a la piscina. El equipo de Rugby femenino me había encantado. Creo que no
valoré a las rivales concienzudamente. Y ahí fallé estrepitosamente.
Baloncesto. Previsión 1-2
Resultado 2
Con las dos
selecciones tal cómo son y tal como iban, este vaticinio era de los más
fáciles.
Sincronizada. Previsión 1
Resultado
Diploma
En realidad
no esperaba más del dúo de sincro español, ellas estuvieron en su nivel, nivel de medalla. Si esperaba más de la visión
histórica de quienes las han puntuado. Esperaba que ocurriese como en otras
disciplinas subjetivas, que se valorase un todo y no una parte. No fue así, y
el dúo español, que era de medalla se quedó en un quinto injusto e histórico.
Afortunadamente,
de quienes no tenía ninguna seguridad, en la rítmica de conjuntos, estuvieron a
la altura de las circunstancias en la final y pusieron a cada conjunto en su
lugar correspondiente, valorando la parte y el todo.
Balonmano. Previsión 1
Resultado
Diploma
El balonmano
femenino (el único en Río, hay que recordar) me daba buena espina, un poste en el último segundo contra Francia
(plata al final) deja claro que estaba ahí, que era más que una ilusión.
El balonmano al que juega España es moderno, intenso, competitivo. Como dato a tener en cuenta, de las 18 convocadas, siete juegan en la liga española. En Francia, Rumanía y Hungría pueden ver jugar semanalmente a once de las jugadoras de la selección. No sé. Igual un ligero cambio de estrategia, sin chovinismo, con sentido del deporte y el mercado, iría bien.
El balonmano al que juega España es moderno, intenso, competitivo. Como dato a tener en cuenta, de las 18 convocadas, siete juegan en la liga española. En Francia, Rumanía y Hungría pueden ver jugar semanalmente a once de las jugadoras de la selección. No sé. Igual un ligero cambio de estrategia, sin chovinismo, con sentido del deporte y el mercado, iría bien.
Waterpolo. Previsión 1
Resultado 2
diplomas
Dos diplomas que
ni en mujeres ni en hombres me han dado la sensación de poderse transformar en
medallas, pero reconozco que infraestimé a algunas selecciones. Igual aquí pudo
más el ojalá.
8.- Halterofilia. Previsión 1
Resultado 1
bronce, 1 diploma.
Lidia, triple
medallista olímpica en cuestión de dos meses.
Aquí tenemos el
doble trabajo de los y las halteras de España. Por un lado el trabajo de Sísifo, de
levantar y volver a levantar. Y por otro el de Hércules contra el Can Cervero,
la plaga de este deporte desde hace décadas, eso que hace que otras y otros
levanten hasta 14 kilos más de los que en realidad podrían. Y En esos dos
trabajos, Lidia ya ha demostrado ser la mejor desde hace tres juegos. Debe ser
una frustración constante encontrarse con tramposas retroactivamente. Y debe
ser y es un orgullo tener a una mujer como Lidia en el deporte.
9.- Bádminton. Previsión 1
Resultado 1 oro
Carolina Marín.
Me recuerda en todo lo deportivo a Michael Jordan.
Su concurso en
Río ha sido un master de alta dirección.
Lamentable el barullo ignorante sobre sus gritos y lamentable el enfoque
sobre el genio Fernando Rivas.
Carolina no podía ser otra cosa que campeona olímpica. Y dejará de ser campeona de lo que sea cuando ella lo decida.
Carolina es un milagro. Y debería estar ya dando lecciones a derrotistas que pululan por las altas esferas de la política española (y deportiva)
Carolina no podía ser otra cosa que campeona olímpica. Y dejará de ser campeona de lo que sea cuando ella lo decida.
Carolina es un milagro. Y debería estar ya dando lecciones a derrotistas que pululan por las altas esferas de la política española (y deportiva)
10.- Ciclismo, Previsión 1
Resulltado 1
bronce, 1 cuarto y 3 diplomas más
¡Qué bien ha estado el ciclismo español en estos juegos! Y qué desapercibido ha pasado. El ciclismo en pista casi ni lo catamos. Por otro lado, es normal que tras la despedida de Joan Llaneras se haya hecho un vacío inmenso. Y por otra parte, en un país con tan poquitos velódromos, esperar que el ciclismo en pista tenga punch internacional resulta ilusorio.
Aquí tenemos la
pescadilla (o pesadilla) que se muerde la cola. Sin instalaciones no hay ciclistas, sin
ciclistas no hay instalaciones. Y ¿quién le pone el cascabel al gato? Desde
luego, el CSD no. La sensación que da es que ni tiene el cascabel ni va a hacer
nada por buscarlo. Lo del Palma Arena fue una puntilla en lugar de un
aldabonazo. Una pena.
CONCLUSIÓN
Y ya está. No contaba con el tenis, a pesar de que el quizá mejor deportista español de la historia pasaba por allí, pero no lo veía esta vez, me equivoqué.
Si contaba con el tiro con arco, que me parece un deporte en el que España debería generar mucha más élite de forma relativamente sencilla.También me equivoqué.
A falta de una estructura más sólida de
deporte de alto rendimiento, tendremos que seguir valorando individualidades en un
mar de esfuerzos individuales.
Ojalá algún día se lance nuestro país a hacer un esfuerzo colectivo y a crear colectivamente colectivos de élite, valga la redundancia.
De la cantidad aparece la calidad. Y la calidad llama a la calidad.
Ojalá algún día se lance nuestro país a hacer un esfuerzo colectivo y a crear colectivamente colectivos de élite, valga la redundancia.
De la cantidad aparece la calidad. Y la calidad llama a la calidad.
No tanto por la
marca España ni cosas similares, más bien por crear una sociedad más deportiva.
Con eso ya nos conformamos. Menos alardes, más deporte.
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